RESEÑA DE “EL CORAZON DEL ATLETA”
La facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia (1.802), creó la “Corporación para investigaciones biológicas” (CIB), institución privada sin ánimo de lucro (1.978) Medellín, Colombia. En 1.995, la institución construyó su propia sede, que cuenta con lo necesario para la esterilización y preparación de medios de cultivo y reactivos.
El libro se titula “Actividad Física y salud cardiovascular.” En la presente me centraré en el capítulo 19 “El corazón del atleta,” que trata un tema de gran importancia: en los últimos años se ha incrementado la utilización de hormonas en los deportistas. Para muchos son de gran ayuda, aunque la realidad sea otra. Por una parte, contribuye al crecimiento y aumento de masa muscular y mayor rendimiento; por otra, el consumo de estas sustancias puede tener un impacto significativo en la salud.
La intención de la CIB es contribuir |al progreso de la ciencia mundial, además de incentivar y servir de apoyo a estudiantes de pre y pos grado para que lleven a cabo sus investigaciones.
Muchos deportistas acuden a sustancias como los ESTEROIDES, pues los hay de varios tipos según la CIB: “esteroides anabólicos androgénicos, responsables de los cambios en los caracteres sexuales primarios y secundarios en el hombre, además aceleran el crecimiento de los tejidos muscular y óseo” (p. 418). También existen esteroides sintéticos, que se consideran doping y poseen efectos adversos como masculinización en atletas femeninas, engrosamiento de la voz, hipertrofia del clítoris, irregularidades menstruales, comportamiento agresivo, tensión nerviosa, espasmos musculares, etc. Es por esto, que podemos comprender entre otras cosas, el porqué las mujeres fisicoculturistas cambian tanto en todos los aspectos. De cierta manera, los esteroides les ayudan a los deportistas a cumplir sus arduas rutinas, para posteriormente participar en competencias. Lo que yo sigo sin entender, es si estas personas están enteradas que esas sustancias que supuestamente les ayuda, en verdad poseen efectos adversos.
El hecho de que el uso de esteroides esté aumentando con el paso de los años, es muy preocupante. Según la CIB, “estas sustancias pueden tener un impacto importante sobre el miocardio (músculo del corazón, encargado de bombear la sangre por el sistema circulatorio mediante contracción) al generar miocardiopatías que acarrean innumerables riesgos como presencia de arritmias ventriculares malignas y posibilidad de muerte súbita” (p. 369), los efectos pueden ser fatales, aunque aún se ignore las consecuencias a largo plazo, y lo que pueda ocurrir con las suspensión de la actividad física, o peor aún, se desconoce el efecto sumado al entretenimiento excesivo. Es muy triste pensar que estos deportistas han colocado sus rutinas de ejercicio por encima de su salud, llevándonos a concluir dos posibilidades: la primera: es que no les interesa lo que pueda pasarle a su salud, y la segunda: es que simplemente compran, consumen y no piensan, cualquiera de las dos es una respuesta inaceptable, porque con la salud no se puede jugar.
En conclusión, la Corporación para investigaciones biológicos, con el capitulo 19 nos invita a pensar en lo que muchas veces hacemos de forma mecánica, sin detenernos a pensar en que esas cosas nos pueden traer graves consecuencias. Sinceramente, me parece irresponsable que los deportistas se obsesionen tanto que dejen de lado el cuidado que deben a su salud, pues si tanto aman lo que hacen, deben empezar por ser honestos con ellos mismos, y si saben que algo les hace daño, evitar hacerlo. De nada sirve amar lo que uno es y lo que hace si no tenemos salud, y por consiguiente ni forma de hacerlo ni aprovecharlo.
Aunque todo el tiempo estemos expuestos a miles de anuncios y testimonios publicitarios, se necesita tener carácter y ser crítico a la hora de decidir qué es lo mejor, porque en estos tiempos no podemos dejar que nos influencien y nos hagan seres mecánicos, esclavos de productos que le hacen daño a nuestra salud.
